Familias de víctimas de fentanilo contaminado siguen sin respuestas a seis meses de la investigación
A más de seis meses del inicio de la causa por fentanilo contaminado, familiares de posibles víctimas aún luchan por confirmar si sus allegados recibieron los lotes defectuosos señalados en una investigación que ya suma 173 fallecimientos bajo sospecha.
La lucha por la verdad tras el fentanilo adulterado: 173 muertes bajo investigación
La tragedia sanitaria desatada por el uso de fentanilo contaminado en hospitales argentinos continúa siendo un profundo foco de incertidumbre y dolor para cientos de familias. Más de seis meses han transcurrido desde el inicio de la pesquisa judicial, y el expediente, que investiga a los laboratorios HLB Pharma y Ramallo S.A. del empresario Ariel García Furfaro, avanza lentamente.
El juez Ernesto Kreplak está a cargo de la causa, que ya acumula la escalofriante cifra de 173 fallecimientos bajo sospecha. A diario, el expediente judicial sigue sumando consultas y posibles nuevos casos, muchos de ellos identificados y articulados gracias a la labor incansable de grupos de WhatsApp y redes sociales donde los afectados intercambian información vital sobre lo ocurrido en centros de salud de La Plata y Rosario.
Revelación forense: El opioide contaminado fue determinante en 38 casos
Uno de los avances más importantes, aunque tardío, provino del Cuerpo Médico Forense (CMF) de la Corte Suprema. A principios de noviembre, se difundió un nuevo análisis que examinó 20 casos adicionales a un estudio previo.
El resultado del CMF fue contundente y estableció un vínculo causal directo en la mayoría de los casos analizados. De las 40 muestras evaluadas en total por los expertos, se determinó que la administración del opioide contaminado “fue clave en el desenlace fatal de los pacientes” en 38 de ellas. Solo en las dos muestras restantes no se logró establecer un vínculo directo y determinante con la muerte.
Esta conclusión científica fortalece la hipótesis central de la causa, demostrando que la contaminación bacteriana con Klebsiella pneumoniae MLB y Ralstonia pickettii en el medicamento anestésico fue un factor clave en las muertes.
La clave para las familias: Los lotes 31.202 y 31.244
La principal dificultad que enfrentan los familiares para que sus casos sean incorporados formalmente a la causa FLP 17371/2025 reside en la identificación del medicamento. Las dudas se centran en dos lotes específicos: el 31.202 y el 31.244.
Estos dos lotes de fentanilo contaminado sumaron más de 300 mil ampollas distribuidas en el sistema de salud. Para poder sumar un caso al expediente, los allegados deben seguir una estrategia específica:
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Revisar la historia clínica: Es indispensable obtener la historia clínica y el parte médico del paciente.
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Identificar el lote: Se debe verificar el número de lote del fentanilo que fue administrado al paciente.
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Acción judicial: En caso de que el lote coincida con los cuestionados (31.202 o 31.244), la recomendación es presentarse ante la Justicia para solicitar formalmente la incorporación del caso a la investigación principal.
El informe parlamentario: Cadena de fallas estatales y registros deficientes
La magnitud de la tragedia motivó la creación de una Comisión Especial en la Cámara de Diputados, que trabajó durante meses para indagar en las responsabilidades. El martes 2 de diciembre, la Comisión presentó su informe final, pintando un panorama desolador de las fallas del sistema de salud y control.
La investigación parlamentaria señaló que lo ocurrido fue una «cadena de fallas evitables» y concluyó que el Estado argentino no pudo garantizar dos elementos fundamentales:
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Trazabilidad: Fallas severas en la capacidad de rastrear el fentanilo una vez distribuido.
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Control adecuado: Inadecuada fiscalización y control sobre los laboratorios productores.
Además, el informe fue crítico con la actuación hospitalaria y de los organismos de fiscalización, al indicar que:
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Hubo hospitales que ocultaron casos.
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Se detectó la existencia de documentación generada “a posteriori” para intentar subsanar la falta de registros.
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Los organismos encargados de la fiscalización actuaron con deficiencia y de manera tardía.
Las conclusiones de la Comisión, incluso basadas en confirmaciones de personal de los propios laboratorios, demuestran la existencia de registros inconsistentes y una falta de previsión que permitió que un medicamento contaminado con potencial mortal se distribuyera masivamente, dejando a las familias en una interminable búsqueda de justicia y verdad.
Urgencia por la trazabilidad y la justicia
La persistencia de la incertidumbre y la necesidad de que los familiares realicen su propia «investigación» revisando historias clínicas subraya la fragilidad del sistema de trazabilidad de medicamentos en el país. Con el informe forense confirmando el vínculo causal en casi 40 muertes y el informe parlamentario señalando las fallas sistémicas, la responsabilidad del Estado y de los laboratorios está cada vez más definida. Las familias, en medio del duelo, exigen que la Justicia actúe con celeridad para que la verdad sobre el fentanilo contaminado se conozca por completo y se establezcan las responsabilidades penales correspondientes.
