Pobreza en Argentina: La UCA cuestiona la magnitud de la baja difundida por el INDEC y pide revisar la metodología

La Universidad Católica Argentina (UCA) puso en duda el reciente informe del INDEC que mostró una marcada caída de la pobreza al 31,6%, asegurando que la magnitud de la baja está "sobrerrepresentada". El Observatorio de la Deuda Social de la UCA alertó sobre inconsistencias metodológicas, la desactualización de las canastas de consumo y la falta de comparabilidad histórica de los datos oficiales.

El reciente informe del INDEC sobre la reducción de la pobreza en el primer semestre de 2025 generó un fuerte debate, sumándose la voz de la Universidad Católica Argentina (UCA) a las críticas. A través de un comunicado de su Observatorio de la Deuda Social Argentina, la institución académica afirmó que, si bien reconocen una mejora real en el indicador de pobreza, el descenso de 6,5 puntos respecto al semestre anterior y de 21,3 puntos con relación a 2024 se encuentra “sobrerrepresentado”.

Inconsistencias por volatilidad y captación de ingresos

El análisis de la UCA apuntó a elementos metodológicos clave que estarían distorsionando la verdadera dimensión del alivio social. Uno de los puntos centrales es la dificultad de medir la pobreza por ingresos en un contexto de “alta volatilidad” económica. Según la UCA, en estos escenarios, la medición tiende a ser menos precisa que en periodos de estabilidad.

Agustín Salvia, director del Observatorio, indicó que la “pobreza estadística” real habría quedado “alrededor del 35%”, y no en el 31,6% informado por el INDEC. Salvia señaló que, aunque la caída de 20 puntos desde finales de 2023 (que se traduciría en unos 8 millones de personas) es estadísticamente cierta, se debe a una comparación entre “sistemas de precios distintos” previos y posteriores a la devaluación inicial.

Otro factor de distorsión radica en la captación de ingresos. El INDEC actualizó el cuestionario de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), lo que si bien mejoró la recolección neta de ingresos laborales y no laborales, limita la comparabilidad con las series históricas anteriores, dificultando un análisis consistente de la evolución del fenómeno a largo plazo.

La canasta básica desactualizada, un problema estructural

La UCA puso un foco particular en la desactualización de las canastas básicas de referencia que utiliza el INDEC para medir tanto la pobreza como la indigencia.

La canasta básica alimentaria y la total se construyen actualmente sobre la base de la estructura de consumo de los años 2004-2005. La universidad advierte que esta falta de actualización, al no considerar la información más reciente (como la de 2017-2018), limita la capacidad de la medición oficial para reflejar con precisión la situación efectiva de los hogares, especialmente en un escenario de fuerte recomposición de tarifas y precios regulados, como el vivido en 2024 y 2025. Los cambios en los patrones de gasto de los hogares no quedan debidamente reflejados con una estructura de consumo de hace dos décadas.

Recomendaciones al INDEC para mayor transparencia

Como conclusión, el comunicado de la UCA advirtió que, a pesar de las mejoras evidentes, son “insuficientes como para marcar una transformación estructural”.

El Observatorio de la Deuda Social Argentina recomendó al INDEC tomar medidas urgentes para restablecer el rigor y la consistencia de los datos. Específicamente, solicitan:

  1. Acelerar la actualización de las canastas de referencia.
  2. Evaluar el impacto de los cambios en los instrumentos de captación de ingresos.
  3. Transparentar su efecto sobre las series históricas de medición.

La UCA subrayó que solo con indicadores más consistentes el país podrá «dar cuenta de los logros, pero que también puedan representar más claramente la persistencia de problemas estructurales de inclusión económica, laboral y social en la Argentina».