Inflación mayorista se acelera: la suba de precios en Argentina en julio superó el 2,8%
La inflación mayorista de Argentina registró una fuerte suba en julio, superando el 2,8%. Este incremento, impulsado por los productos importados, se ubicó por encima del Índice de Precios al Consumidor (IPC) y del registro del mes anterior.

Acelera la inflación mayorista y se ubica por encima del IPC
La inflación mayorista en Argentina experimentó una notable aceleración en julio, con el Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) registrando un incremento del 2,8% con respecto al mes anterior. Este dato, divulgado por fuentes oficiales, no solo supera la variación de precios minoristas (IPC) del mismo período, que fue del 1,9%, sino que también marca un incremento significativo en comparación con la suba del 1,6% que se había registrado en junio.
El aumento del IPIM fue impulsado principalmente por la suba de los “Productos importados”, que alcanzaron un incremento del 5,7%, y, en menor medida, por los “Productos nacionales”, que crecieron un 2,6%. Esta marcada diferencia sugiere una fuerte influencia de la cotización de la moneda extranjera y las condiciones del comercio internacional en la estructura de costos de la economía local.
El impacto de los productos importados en la suba de precios mayoristas
La fuerte incidencia de los productos importados en la variación del IPIM es un factor clave para comprender la dinámica inflacionaria en la cadena de producción. A diferencia del mes anterior, cuando los productos importados subieron solo un 1,3%, en julio se observa un salto significativo de 5,7%, que casi triplica la suba registrada en los productos nacionales. Este fenómeno puede atribuirse a la devaluación de la moneda local, el aumento de los fletes internacionales o la inflación en los países de origen de las importaciones, transfiriendo directamente esos costos a los precios mayoristas en el mercado interno.
Dentro de los “Productos nacionales”, la suba también fue heterogénea. Algunos rubros registraron aumentos significativos que traccionaron el promedio al alza. Se destacaron los productos pesqueros, con un 5,7%; los agropecuarios, con 4,2%; las máquinas y aparatos eléctricos, con 6,1%; y los productos químicos, con 4,9%. Por su parte, los textiles aumentaron 2,3% y los alimentos y bebidas, 1,1%, mostrando una suba más moderada. Estos datos reflejan presiones inflacionarias en sectores primarios y en la industria manufacturera, que impactan en la cadena de valor y, eventualmente, podrían trasladarse a los precios finales de los consumidores.
La inflación mayorista anual supera el 20%
Analizando la variación interanual, los precios mayoristas acumularon una suba del 20,9% en julio en comparación con el mismo mes del año anterior. En lo que va del año, la inflación mayorista acumulada ya alcanzó el 12,3%. Estos porcentajes reflejan la persistencia de la alta inflación en la economía, que impacta directamente en los costos de producción de bienes y servicios.
Esta dinámica de la inflación mayorista es un indicador adelantado de lo que podría suceder en los próximos meses con la inflación minorista, ya que los aumentos de precios en el nivel mayorista tienden a ser trasladados, con cierto rezago, a los precios que paga el consumidor final. En este contexto, la aceleración de julio representa una señal de alerta para los precios futuros y un desafío para la gestión económica.