Servicios y transporte: Un golpe al bolsillo que supera el medio salario mínimo
En julio, los hogares del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) debieron destinar más del 60% de un salario mínimo para cubrir los costos de electricidad, gas, agua y transporte, una cifra que asciende a $193.329. Este gasto esencial, que se disparó un 5,4% en el último mes, contrasta con las mediciones oficiales de inflación y revela una creciente presión sobre la economía familiar, impulsada por ajustes tarifarios y el aumento estacional del consumo.

En un contexto donde la inflación oficial, medida por el INDEC, parece mostrar una desaceleración, la realidad de los hogares argentinos, especialmente en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), se ve fuertemente impactada por el creciente costo de los servicios públicos y el transporte. Un informe reciente del Observatorio de Tarifas y Subsidios del IIEP (UBA-CONICET) reveló que, en julio de 2025, un hogar promedio sin subsidios en el AMBA necesitó la alarmante cifra de $193.329 mensuales para cubrir sus gastos básicos en electricidad, gas, agua y transporte.
Esta cifra representa un incremento del 5,4% respecto al mes anterior y es un 40% superior al gasto registrado en el mismo período del año 2024. Más preocupante aún, este desembolso equivale a un contundente 60% de un salario mínimo, que a julio se ubica en $317.800. La brecha entre los datos macroeconómicos y la realidad cotidiana de las familias se hace cada vez más evidente, poniendo de manifiesto la necesidad de una mirada más profunda sobre el poder adquisitivo.
El desglose de los gastos: transporte lidera los incrementos
Al analizar la composición de este gasto en servicios, el informe del IIEP detalla cómo se distribuye la carga para los hogares:
- Electricidad: $45.993 mensuales.
- Gas: $46.693 mensuales.
- Agua: $30.861 mensuales.
- Transporte: $69.783 mensuales (por persona).
Estos incrementos se explican por una combinación de ajustes en los cuadros tarifarios de todos los servicios públicos y el aumento del consumo estacional, particularmente en el caso de la energía eléctrica y el gas natural durante los meses de invierno.
Factores detrás del alza: tarifas y estacionalidad
El informe subraya que el aumento del 5,4% en la canasta de servicios durante julio se debe a múltiples factores:
- Agua: El cuadro tarifario se incrementó y el consumo se ajustó por la cantidad de días del mes, ya que julio tiene un día más que junio.
- Gas: Se aplicó un aumento en el cuadro tarifario (1,1% en el cargo fijo y 1,8% en el cargo variable), sumado a un mayor consumo debido a la estacionalidad invernal.
- Energía eléctrica: Se observó un crecimiento del consumo respecto al mes anterior, acompañado de un incremento en los cuadros tarifarios (0,7% en el cargo fijo y 2,4% en el cargo variable).
- Colectivos: Las tarifas de las líneas de la Ciudad de Buenos Aires aumentaron en línea con el IPC más un 2%, resultando en un 3,5% para julio. Por su parte, las líneas interjurisdiccionales a cargo de la Nación registraron, por segundo mes consecutivo, un aumento del 7%. Esto elevó el costo promedio ponderado del boleto en un 5,1%.
En síntesis, la conjunción de estos ajustes tarifarios y el mayor consumo invernal de energía y gas fueron los principales impulsores del incremento en la canasta de servicios.
Desacople con la inflación oficial y el impacto acumulado
Desde diciembre de 2023 hasta julio de 2025, la canasta de servicios públicos del AMBA experimentó un brutal incremento del 597%, mientras que el nivel general de precios, según los datos oficiales, lo hizo en un 154%. Esta disparidad resalta cómo los aumentos en los servicios han superado con creces la inflación promedio, afectando desproporcionadamente el presupuesto de los hogares.
No obstante, al comparar julio de 2025 con julio de 2024, el costo de la canasta total se incrementó un 40%, en línea con la estimación del IPC del 36% para el mismo período. Esta «cierta convergencia» observada a partir de mayo sugiere que los servicios públicos podrían estar comenzando a alinearse más con el índice general de precios. Sin embargo, el informe enfatiza que el efecto de las cantidades consumidas de energía es significativo durante el invierno, explicando gran parte de las variaciones en las facturas finales de los usuarios.
El desglose interanual revela que el transporte fue el servicio con el incremento más pronunciado, con un aumento del 71% respecto a julio de 2024. Le siguió el agua con un 33%, mientras que el gas natural y la energía eléctrica aumentaron un 26% cada uno en términos interanuales. El gasto en transporte contribuyó con 21 puntos porcentuales al incremento interanual total de 40 puntos, superando el aporte de la energía eléctrica y el gas (7 puntos porcentuales cada uno) y el agua (5 puntos).
Subsidios y el peso en el salario promedio
A pesar de los incrementos tarifarios, el informe señala que en los hogares del AMBA, las tarifas de servicios públicos en promedio cubren solo el 50% de los costos, siendo el Estado quien se hace cargo del 50% restante a través de subsidios. Esta cobertura, sin embargo, es dispar entre los diferentes segmentos de hogares y los distintos servicios. En julio, la cobertura tarifaria aumentó levemente (3 puntos porcentuales) respecto al promedio de los últimos 18 meses (47%), explicado por el traslado parcial del aumento de los costos de generación. Esto implica que, incluso los usuarios residenciales de altos ingresos (N1), recibieron subsidios en su factura eléctrica durante este mes.
Finalmente, la canasta de servicios públicos del AMBA en julio de 2025 representó el 13,1% del salario promedio registrado estimado para el mes ($1.471.842). Dentro de esta canasta, el transporte sigue siendo el componente más pesado, representando el 36% del gasto total en servicios, un valor que se eleva aún más debido a factores estacionales que afectan el consumo de otros servicios.
La sostenida escalada de los costos de los servicios y el transporte representa un desafío significativo para la economía de los hogares argentinos, obligando a una reasignación de recursos que impacta directamente en el poder adquisitivo y la calidad de vida. ¿Qué otras medidas crees que podrían implementarse para aliviar la carga económica de los servicios públicos en los hogares?