Recortes en salud: el gobierno de Milei despide a 110 trabajadores del Hospital Posadas y sanciona al Garrahan

El ajuste fiscal impulsado por el gobierno de Javier Milei ha llegado con fuerza al ámbito de la salud pública, generando una ola de despidos y sanciones que incrementan la incertidumbre y el conflicto en hospitales de referencia nacional. En los últimos días, el Ministerio de Salud ha ejecutado una serie de acciones que evidencian una postura inflexible frente a los reclamos laborales y las denuncias de precarización en el sector.

Despidos en el Posadas: «No hay lugar para ñoquis»

La decisión más resonante ha sido el despido de 110 trabajadores del Hospital Nacional Profesor Alejandro Posadas, ubicado en El Palomar, provincia de Buenos Aires. La cartera sanitaria justificó esta medida a través de un comunicado oficial, argumentando que los cesanteados fueron identificados en una «auditoría interna» como personal que «no cumplía con tareas efectivas».

Según el comunicado oficial, la salida de estos trabajadores permitirá «redirigir fondos a mejores insumos, equipamiento y atención para los pacientes». El Ministerio de Salud sentenció: “En esta gestión no hay lugar para ñoquis ni acomodos. Cada peso que se malgasta en quienes no trabajaban, ahora se va a invertir en quienes sí ponen el cuerpo todos los días”. Esta declaración refleja la línea discursiva del gobierno, que busca legitimar los recortes bajo el argumento de eficiencia y transparencia.

Sin embargo, los trabajadores del Posadas han expresado su profundo repudio a los despidos, calificando la decisión de «lamentable» y negando las acusaciones de inactividad. Han denunciado que sus reclamos y advertencias sobre la situación laboral nunca fueron escuchados, a pesar de haber enviado comunicaciones formales. La tensión en el hospital se agudizó con la renuncia de su titular la semana pasada, dejando la dirección acéfala y sumando incertidumbre al panorama institucional.

En un intento por aplacar el descontento, el gobierno había propuesto un «bono interno» no remunerativo, similar al implementado en el Garrahan. No obstante, el director que impulsaba esta medida también presentó su renuncia, dejando sin efecto la iniciativa y profundizando la crisis de gestión en el Posadas.

Tensión en el Garrahan: descuentos por medidas de fuerza

La política de ajuste también se extiende al Hospital de Pediatría S.A.M.I.C. «Prof. Dr. Juan P. Garrahan», uno de los centros de salud pediátrica más importantes de América Latina, que se ha convertido en epicentro de un conflicto por bajos salarios, precarización laboral y recortes presupuestarios.

En línea con la postura adoptada en el Posadas, el Ministerio de Salud anunció que aplicará descuentos salariales a los trabajadores del Garrahan que se sumaron a las protestas y medidas de fuerza organizadas por la Asociación Trabajadores del Estado (ATE). “El gremio eligió violar la ley y perjudicar a los pacientes. Por eso, también avanzaremos con el descuento del día a todos los trabajadores que se sumaron a estas medidas de fuerza ilegales”, informó la cartera sanitaria.

La situación en el Garrahan se complejiza ante la falta de diálogo. El Poder Ejecutivo no envió representantes a la audiencia pactada para este miércoles con los sindicatos del hospital. En cambio, el gobierno exigió que se levante “de inmediato” la Conciliación Obligatoria dictada por el conflicto, lo que indica una postura confrontativa y una falta de voluntad para negociar con los representantes gremiales.

Movilización del personal médico y creciente incertidumbre

En respuesta a estas medidas, la Asamblea de Trabajadores Residentes y Concurrentes de CABA ha convocado a un paro con guardia y movilización. Esta acción busca expresar solidaridad con los despedidos del Hospital Posadas y respaldar los reclamos del Garrahan. En un comunicado conjunto, la Asamblea manifestó: “Repudiamos la amenaza de despidos de nuestrxs compañerxs. Los acompañamos en su lucha. Convocamos a AMM y a la Federación de Profesionales a luchar en conjunto por la recomposición salarial”.

Los profesionales de la salud denuncian que las políticas oficiales implementadas por el gobierno de Milei reproducen un modelo de gestión basado en amenazas, disciplinamiento y recortes. Este escenario genera una profunda incertidumbre entre el personal médico y asistencial, que ve amenazada su estabilidad laboral y las condiciones de atención en los hospitales públicos. La tensión en el sistema de salud promete escalar en los próximos días, con los trabajadores en alerta ante la continuidad de las medidas de ajuste.