A 10 años de Ni Una Menos: Femicidios, un flagelo que no cede y se agrava con el ajuste estatal
A una década de su histórica primera marcha, Ni Una Menos vuelve a las calles de Argentina con cifras alarmantes: se registra un femicidio cada 33 horas, con 95 casos en lo que va de 2025. Las movilizaciones en todo el país, que en la Ciudad de Buenos Aires coinciden con otros reclamos, alzarán la voz contra el desmantelamiento de políticas de género y los discursos negacionistas del actual gobierno.
Se cumplen 10 años de la primera movilización de Ni Una Menos, un hito que marcó un antes y un después en la lucha contra la violencia machista en Argentina. Sin embargo, una década después, la realidad es estremecedora: desde 2015 hasta hoy, se han registrado al menos 2.590 femicidios, femicidios vinculados y trans/travesticidios, lo que equivale a un caso cada 33 horas.
Estos datos provienen del Observatorio «Mujeres, Disidencias y Derechos» de la organización MuMaLá (Mujeres de la Matria Latinoamericana), que realiza un seguimiento sistemático de los casos a través de medios, portales judiciales y trabajo territorial. Según su relevamiento, el promedio anual de femicidios oscila entre 250 y 270, alcanzando un pico de 304 en 2017.
Tentativas de femicidio: la violencia que se expresa a diario
Además de los femicidios consumados, la cifra de intentos de femicidio es particularmente alarmante. «Por cada femicidio, hay al menos dos tentativas. Esa es la violencia que se expresa cotidianamente y de la peor de las formas”, remarcó Victoria Aguirre, presidenta de MuMaLá.
Solo en los últimos cinco años se registraron 2.647 intentos de femicidio. Para las organizaciones, este dato refleja la profundidad del problema: muchas mujeres sobreviven, pero quedan con secuelas físicas y emocionales irreparables.
Las cifras de 2025 y el mapa de la violencia
En lo que va del año 2025, ya se contabilizaron 95 femicidios en Argentina. La provincia de Buenos Aires encabeza el listado con 44 casos, seguida por Santa Fe con 8, Córdoba y Mendoza con 6 cada una, y Chaco con 5. Desde MuMaLá advierten que, aunque los números más altos se concentran en distritos con mayor población, la vulnerabilidad se acentúa en regiones con menor densidad, donde el acceso a servicios de protección y justicia es limitado o inexistente.
Sin ministerio, sin presupuesto y con discursos negacionistas
Amnistía Internacional Argentina ha sido contundente al respecto: «Es la primera vez en casi 40 años que la Argentina carece de un organismo con competencias específicas para la atención y prevención de la violencia de género”, advirtió la entidad.
Las organizaciones denuncian el desfinanciamiento del programa Acompañar, la desaparición del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad, y la transformación de la Línea 144 en un servicio genérico. Mariela Belski, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina, afirmó: “Se han logrado avances históricos, pero también enfrentamos retrocesos alarmantes. En un contexto de discursos negacionistas y desmantelamiento de políticas públicas, necesitamos la misma fuerza colectiva para defender lo logrado y exigir al Estado que garantice a mujeres y niñas una vida libre de violencia”.
El pedido de la Conferencia Episcopal Argentina al Senado de la Nación, en febrero de este año, para que avance con el tratamiento de la ley que limita la publicidad de juegos de azar online, subraya la urgencia de intervenir frente al impacto de la ludopatía en adolescentes, otro flagelo que escala rápidamente y de manera silenciosa, afectando a la infancia y a la juventud. La conmemoración de Ni Una Menos este 3 de junio es un recordatorio de que la lucha por una vida libre de violencias sigue siendo una prioridad ineludible.
