Caso Dalmasso: la Justicia rechaza la prescripción y el parquetista Bárzola queda en la mira para un posible juicio

Un giro decisivo se produjo en la investigación del resonante crimen de Nora Dalmasso, ocurrido en Río Cuarto hace más de 18 años. El juez de Control Diego Ortiz resolvió rechazar la prescripción de la causa, una medida que mantiene viva la posibilidad de que Roberto Bárzola, el parquetista cuyo ADN fue hallado en la escena del crimen, enfrente un juicio oral por el femicidio que conmocionó a la opinión pública argentina.

La decisión del magistrado cordobés representa un espaldarazo a la continuidad de la pesquisa y al «deber de investigar» que recae sobre el fiscal Pablo Jávega. Este pronunciamiento judicial se enmarca en un contexto donde la causa ha transitado un largo y complejo camino, incluyendo la absolución del viudo Marcelo Macarrón en el último juicio, instancia en la que se abrió la puerta a investigar el homicidio bajo el prisma de la violencia de género.

La resolución de Ortiz ha generado un impacto directo en el principal acusado, Roberto Bárzola. Su abogado defensor, quien asumió a principios de abril y había manifestado su intención de no buscar la prescripción, ahora se encuentra analizando los fundamentos del fallo para determinar si apelará la medida. Anteriormente, el letrado había sugerido la posibilidad de que Bárzola declare ante la Justicia, un escenario que podría tomar mayor relevancia tras esta nueva instancia judicial.

Por su parte, la familia de Nora Dalmasso ha recibido con satisfacción la decisión del juez. La querella, que representa a los Macarrón, confía en que la investigación avanzará firmemente hacia un juicio contra el parquetista. Su objetivo es lograr una condena contra Bárzola o, al menos, una declaración de culpabilidad, incluso si esto no implica una pena de prisión efectiva. Los querellantes también evalúan la posibilidad de apelar para solicitar que se permita una condena con pena de prisión, argumentando que su rol como acusados en etapas previas les impidió profundizar en esta línea investigativa.

Los abogados de la familia Dalmasso subrayaron la importancia de las pericias de ADN que, una vez que la investigación se desvinculó de la familia, arrojaron un resultado positivo para Roberto Bárzola. Estas muestras cruciales fueron levantadas del cinto de la bata con la que Nora Dalmasso fue estrangulada y de un vello hallado en una de sus piernas, elementos que complican seriamente la situación del parquetista.

El fiscal Jávega, en sintonía con la querella, argumentó que el tiempo de prescripción no debe contarse de forma lineal, considerando que tanto Macarrón como su hijo estuvieron imputados y, por lo tanto, no pudieron ejercer su rol de querellantes hasta hace pocos meses. Tanto el fiscal como la familia Dalmasso enfatizan que aplicar un límite de 15 años desde la fecha del crimen vulneraría el derecho de la víctima y revictimizaría a su familia al no permitirles actuar en el rol que les correspondía.

Fuentes cercanas a la causa indicaron que la defensa previa de Bárzola se habría centrado en la prescripción por el tiempo transcurrido, más que en la inocencia de su defendido. Esta estrategia se interpretaría como un intento de cerrar la causa por una cuestión técnica, dado que no solo la pericia de ADN complica al parquetista, sino también las presuntas contradicciones en sus declaraciones, que tanto el fiscal como la familia Dalmasso buscan que se aclaren en un futuro debate oral.

Tras conocerse el fallo, Gustavo Liebau, uno de los abogados de la familia Macarrón, afirmó que «los elementos reunidos fortalecen la acusación que hizo el fiscal» contra Bárzola. Además, confirmó que no se «van a conformar con conocer la verdad histórica, sino que vamos a ir por lo que corresponde en la Justicia», en alusión a buscar una condena a prisión para el sospechoso. Por su parte, Mariángeles Mussollini, abogada de Facundo Macarrón, calificó el fallo como «una victoria importante», aunque reconoció que es «el principio de un arduo camino». La letrada enfatizó que «la impunidad no puede triunfar» y destacó que la sociedad necesita «no solo la verdad, sino también la justicia». Mussollini también hizo hincapié en que el dictamen del fiscal Jávega y el fallo del juez Ortiz «también cuestionan el desempeño de los anteriores fiscales».

Con esta reciente resolución, se abre la posibilidad de que, casi 19 años después del brutal femicidio de Nora Dalmasso, la investigación avance y la Justicia pueda finalmente determinar responsabilidades en un caso que ha mantenido en vilo a la sociedad argentina durante casi dos décadas.