«Cónclave»: La película nominada al Oscar que resurge tras la partida del Papa Francisco
El film, ganador del Oscar a Mejor Guion Adaptado, ofrece una mirada ficcional al proceso de sucesión papal y a las tensiones internas de la Iglesia Católica.

En medio de la conmoción global por la noticia de la muerte del Papa Francisco, la película «Cónclave» ha resurgido como tema de conversación, ganando notoriedad por su representación del complejo proceso de sucesión papal. Aunque se trata de una obra de ficción, los ritos y dinámicas que presenta ofrecen una visión esquemática de las distintas facciones dentro de la Iglesia Católica y los desafíos que enfrenta en la actualidad.
Dirigida por Edward Berger y basada en la novela homónima de Robert Harris, con guion adaptado por Peter Straughan, «Cónclave» fue aclamada por la crítica y obtuvo ocho nominaciones al Oscar, llevándose la estatuilla a Mejor Guion Adaptado.
La trama de «Cónclave» se centra en el periodo de sede vacante tras la muerte de un Papa progresista y popular. El cardenal decano Thomas Lawrence (interpretado por Ralph Fiennes) es el encargado de coordinar y dirigir la elección del nuevo Sumo Pontífice. En este contexto de gran presión, Lawrence también lidia con sus propias dudas de fe.
El cónclave reúne a cardenales «papables» que representan a los diversos sectores de la Iglesia. Entre ellos se encuentra Aldo Bellini (Stanley Tucci), visto como el continuador del legado del Papa fallecido y representante del ala progresista; Goffredo Tedesco, un conservador italiano que aboga por un mensaje vaticano más combativo en un contexto de «Guerra Santa»; y otros postulantes cuyo valor reside más en los intereses geopolíticos que representan que en sus propias ideas.
Sin embargo, el curso de la sucesión da un giro inesperado con la llegada al Vaticano del cardenal Vincent Benítez (Carlos Diehz), un hombre con una trayectoria de servicio a los más vulnerables y cuyo nombramiento secreto por el Papa difunto altera los planes de todos.
A través de esta trama, la película explora los conflictos internos que atraviesan a la Iglesia Católica contemporánea: la tensión entre progresistas y conservadores, exacerbada por la crisis migratoria y la intolerancia religiosa en Occidente, y las soluciones radicalmente opuestas que ambos sectores proponen.
«Cónclave» también aborda los aspectos más humanos de los cónclaves, donde a menudo se mezclan la fe con cálculos políticos pragmáticos, planteando la pregunta sobre el verdadero espíritu que debe guiar la elección del Obispo de Roma.
Estrenada en un momento en que la salud del Papa Francisco ya generaba cierta preocupación, la película se ha convertido ahora, tras su fallecimiento, en una ventana para comprender mejor el intrincado mundo de la sucesión papal, un proceso siempre cargado de incertidumbre y con importantes implicaciones para la Iglesia Católica a nivel global.