JP Morgan toma distancia de Milei: incertidumbre y menor apoyo del FMI

Las señales contradictorias del Ejecutivo de Javier Milei sobre la política cambiaria y el acuerdo con el FMI han generado un clima de incertidumbre en los mercados. En un reciente informe, JP Morgan alertó sobre la persistencia de la inestabilidad cambiaria mientras no haya claridad sobre las medidas oficiales. «Creemos que la incertidumbre que afecta a los mercados cambiarios en Argentina es temporal. Sin embargo, sospechamos que se necesita claridad sobre el futuro de la política cambiaria», sostuvo el banco.

Los bonos soberanos argentinos continúan en baja y la presión sobre el dólar sigue en aumento. La desconfianza en torno al acuerdo con el FMI y la falta de definiciones concretas por parte del Gobierno alimentan la brecha cambiaria y afectan la cotización de los títulos de deuda. JP Morgan señaló que el tipo de cambio oficial se encuentra rezagado y advirtió sobre la creciente expectativa de una corrección en el corto plazo. A esto se suma la reciente venta de reservas del Banco Central para contener la volatilidad cambiaria, lo que refuerza la presión sobre el peso.

Mientras el Gobierno insiste en que el acuerdo con el FMI implicará un desembolso de 20.000 millones de dólares de libre disponibilidad, el organismo internacional no ha confirmado esa cifra. Desde el Fondo han aclarado que «las autoridades argentinas solicitaron un paquete de financiamiento total de 20.000 millones de dólares», pero su aprobación dependerá del análisis del Directorio Ejecutivo. Esta falta de certezas refuerza la cautela del mercado y complica la estrategia del Gobierno en su intento de asegurar el apoyo financiero del organismo.

El Banco Central, que había logrado acumular compras por 24.000 millones de dólares desde diciembre, en los últimos nueve días debió vender 1.445 millones para contener la volatilidad cambiaria. JP Morgan alertó sobre la preocupación en torno a la sobrevaluación del peso y destacó que, a pesar de que el BCRA mantiene un ritmo de compras netas de aproximadamente 1.500 millones de dólares mensuales, las presiones sobre el mercado continúan siendo elevadas.

Otro punto que genera incertidumbre es el destino de los fondos solicitados al FMI. Mientras el Gobierno sostiene que los recursos tendrán «libre disponibilidad», el análisis de JP Morgan sugiere que el acuerdo estaría destinado principalmente a cubrir vencimientos con el organismo y a reforzar las reservas del Banco Central. «Todo lo que sabemos sobre el programa es que los fondos se utilizarán para los reembolsos al FMI durante los próximos cuatro años y medio y para fortalecer el balance del BCRA», afirmó el banco de inversión. Esta discrepancia entre las expectativas oficiales y la realidad del mercado profundiza la incertidumbre en un contexto de creciente presión cambiaria.

El panorama económico se complejiza a medida que el Gobierno de Milei enfrenta el desafío de alcanzar un equilibrio entre sus aspiraciones de financiamiento y las exigencias del FMI. La falta de definiciones concretas y las diferencias en torno al uso de los fondos solicitados generan un clima de desconfianza en los mercados, lo que impacta en la cotización de los bonos y en la estabilidad cambiaria. En este escenario, la claridad en la política económica y cambiaria se vuelve fundamental para restablecer la confianza de los inversores y reducir la volatilidad financiera.