Revés judicial para Milei en el caso $LIBRA: los damnificados podrán impulsar la investigación

La Justicia habilitó a tres damnificados del criptescándalo $LIBRA a actuar como querellantes en la causa que involucra al presidente Javier Milei y su hermana Karina. Esta decisión fortalece la posición de las víctimas y complica el escenario judicial del mandatario.

La investigación sobre la presunta estafa vinculada a la criptomoneda $LIBRA sumó un nuevo capítulo que representa un duro revés para el presidente Javier Milei. La Cámara Federal porteña revirtió una decisión de primera instancia y permitió que tres damnificados sean querellantes en el caso que tramita en Comodoro Py. En paralelo, la jueza Sandra Arroyo Salgado ya había adoptado una medida similar en los tribunales de San Isidro, lo que refuerza el avance de la investigación.

La decisión de la Cámara, tomada por los jueces Eduardo Farah, Roberto Boico y Martín Irurzun, revocó el fallo de la magistrada María Servini, quien había rechazado la solicitud de los damnificados al considerar que no se había probado la existencia de una estafa. No obstante, el tribunal superior sostuvo que la posibilidad de querellar no depende de la demostración de un delito consumado, sino de la hipótesis planteada por los afectados, lo que abre la puerta a que participen activamente en el proceso judicial.

Los tres querellantes, cuyos nombres se resguardan bajo las iniciales J.M, M.P y A.V, son representados por el abogado y dirigente social Juan Grabois, junto a los letrados Nicolás Rechanik y Carolina Palacin Roitbarg. Esta incorporación les otorga el derecho a acceder al expediente, solicitar medidas de prueba y presentar apelaciones, lo que podría dificultar un eventual cierre rápido de la causa.

La resolución también introduce un elemento clave en la investigación: la necesidad de obtener peritajes técnicos sobre la adquisición del token y la trazabilidad del dinero involucrado. Según la Cámara, se deberán recabar informes especializados para determinar la validez de la documentación presentada por los querellantes, quienes adjuntaron capturas de pantalla, registros digitales y hasta una filmación que demostraría la compra del criptoactivo. Este punto es crucial, ya que busca confirmar que efectivamente sufrieron perjuicios económicos.

El caso $LIBRA se originó tras una serie de denuncias en Comodoro Py, donde se acusa a Milei de haber promovido el token en redes sociales, otorgándole legitimidad y generando una ola de inversores que, según los denunciantes, fueron víctimas de una maniobra fraudulenta. La moneda digital se disparó en valor tras el respaldo del presidente, pero su caída rápida dejó importantes pérdidas para quienes la adquirieron.

El impacto político de la decisión judicial es significativo. Al reconocer a los damnificados como querellantes, la Justicia admite que existen elementos suficientes para sospechar de una posible estafa. Además, esto obstaculiza un cierre exprés de la causa, ya que cualquier resolución podrá ser apelada por los perjudicados.

Juan Grabois celebró la decisión en la red social X, donde calificó el caso como “una estafa a cielo abierto” y aseguró que trabajará para que los responsables sean condenados y devuelvan lo que, según él, le arrebataron a los argentinos. En sus declaraciones, apuntó directamente a Karina Milei y a otros imputados, a quienes acusó de utilizar su influencia para favorecer la maniobra.

El avance de la investigación coloca a Milei en una situación judicial delicada. Si bien la causa aún está en una etapa preliminar, el hecho de que los damnificados sean reconocidos como querellantes implica que podrán impulsar medidas de prueba que podrían comprometer a los involucrados. Además, abre la posibilidad de que nuevas víctimas se sumen al expediente y refuercen la acusación.

En un contexto político y económico tenso, esta resolución podría tener repercusiones en la imagen del presidente y su gobierno. Con la causa en marcha y los querellantes en acción, el caso $LIBRA promete seguir dando que hablar en los tribunales y en el debate público.