El Indec retrasa el nuevo IPC: ¿cuánto afecta la medición de la inflación?

El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) enfrenta críticas por la demora en implementar su nueva metodología para el cálculo del Índice de Precios al Consumidor (IPC). Según un informe reciente de la Universidad Torcuato Di Tella, de haberse adoptado la actualización, la inflación acumulada de 2024 habría sido 16 puntos porcentuales más alta que el dato oficial del 117,8%.
La brecha entre el IPC y el costo de vida

El Indec reconoce que el IPC no refleja plenamente las vivencias económicas de los argentinos. En comunicados recientes en redes sociales, explicó que el “costo de vida” incluye factores subjetivos, como la adaptación de las familias a precios cambiantes. Por ejemplo, la sustitución de un tipo de carne por otra más económica.

El organismo aclara que el IPC mide las variaciones de precios de una canasta fija de bienes y servicios basada en un promedio nacional, lo que no necesariamente coincide con las realidades de los hogares. “Sería raro que la canasta de un hogar particular coincida con la del IPC. Hay familias con diferentes edades, ingresos y necesidades específicas que afectan sus patrones de consumo”, indicó el Indec.

Una actualización que avanza lentamente

Actualmente, el IPC se calcula con datos de la Encuesta de Gasto de los Hogares (ENGHo) 2004-2005. La nueva metodología, basada en la ENGHo 2017-2018, promete ser más representativa de los patrones actuales de consumo. Esta actualización, avalada por el Fondo Monetario Internacional, ajustaría las ponderaciones de los diferentes rubros, como alimentos, vivienda y comunicaciones.

Por ejemplo, la participación de “Alimentos y bebidas” caería del 25,7% al 22,7%, mientras que “Vivienda y servicios” aumentaría de 9,44% a 14,5%. Esto podría tener un impacto significativo en los datos inflacionarios, dado que sectores como vivienda han mostrado incrementos por encima de la media.

Sin embargo, la aplicación del nuevo esquema depende del aval del Ministerio de Economía. Dado el contexto político y económico, algunos analistas sugieren que la implementación se podría retrasar debido a su potencial impacto en la percepción pública de la inflación.

Impacto político y estadístico

El economista Martín González Rozada, de la Universidad Torcuato Di Tella, destacó que la nueva metodología habría elevado la inflación de 2024 al 134%. Esto se debe al mayor peso otorgado a rubros con subas significativas, como vivienda y comunicaciones. En declaraciones radiales, Rozada explicó: “Mi trabajo muestra cómo cambian las tasas de inflación al modificar las ponderaciones de la canasta”.

La demora en la implementación del nuevo IPC genera interrogantes sobre la transparencia y la oportunidad de las estadísticas oficiales. Mientras tanto, los argentinos enfrentan una inflación que, en la práctica, se siente mucho más alta de lo que reflejan los datos actuales.

Conclusión

La brecha entre el IPC y el costo de vida real subraya la necesidad de estadísticas más precisas y actualizadas. La implementación de la nueva metodología podría ofrecer una imagen más clara de la inflación, pero también podría representar un reto político para el gobierno. Mientras tanto, los argentinos continúan navegando un contexto económico marcado por aumentos de precios que parecen imparables.