Cuidado: las estafas virtuales que prometen descuentos pero vacían cuentas bancarias

La nueva modalidad de los ciberdelincuentes utiliza ofertas falsas para robar datos sensibles. Aprenda cómo operan y cómo protegerse de estas amenazas.

En el mundo digital actual, los ciberdelincuentes han perfeccionado sus estrategias para engañar a las personas y acceder a sus datos financieros. Una de las modalidades más recientes consiste en la difusión de falsos descuentos, utilizados como anzuelo para capturar información bancaria.

A través de redes sociales, correos electrónicos o mensajes de texto, las víctimas son dirigidas a sitios fraudulentos que imitan plataformas confiables. En estos espacios, se solicita información sensible bajo el pretexto de acceder a una promoción tentadora. Los datos recopilados se usan para vaciar cuentas bancarias en cuestión de minutos, dejando a las víctimas con pérdidas financieras considerables.

El funcionamiento de la estafa

El esquema comienza con la creación de anuncios atractivos vinculados a marcas reconocidas o tiendas populares. Estos mensajes incluyen enlaces que redirigen a páginas web diseñadas para simular sitios auténticos.

En estos portales falsos, los usuarios son incitados a ingresar números de tarjetas, contraseñas o códigos de seguridad, bajo la excusa de acceder al beneficio promocionado. La presión ejercida mediante frases como «oferta limitada» o «últimas horas» busca que las personas actúen impulsivamente, sin verificar la legitimidad del sitio.

Una vez obtenida la información, los estafadores realizan transferencias, pagos o compras no autorizadas. Incluso pueden desactivar las notificaciones bancarias para que las víctimas no detecten el fraude de inmediato.

Cómo protegerse de estas amenazas

La mejor defensa contra estas estafas es la prevención y el conocimiento. Para evitar ser víctima, se recomienda seguir estas prácticas:

  • Verificar la autenticidad de los sitios web: Ingresar directamente a las páginas oficiales de bancos o comercios en lugar de usar enlaces de correos o mensajes.
  • Dudar de las ofertas demasiado buenas: Si parece demasiado tentador o genera urgencia extrema, es probable que sea una estafa.
  • Proteger información sensible: Nunca proporcionar contraseñas, códigos de seguridad o datos bancarios a través de enlaces o mensajes.
  • Usar herramientas de seguridad digital: Activar la autenticación en dos pasos, utilizar aplicaciones oficiales y monitorear las notificaciones de actividad bancaria.

Mantenerse informado y actuar con precaución puede marcar la diferencia entre proteger el patrimonio personal o ser víctima de los ciberdelincuentes. La atención y el sentido crítico son esenciales para navegar en un entorno digital cada vez más complejo.