Pediatras alertan sobre el deterioro de la salud pública infantil en Argentina
La Sociedad Argentina de Pediatría denuncia salarios bajos, falta de profesionales y un sistema al borde del colapso.
En la previa del Día del Médico, la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) emitió un alarmante comunicado donde describe la «situación crítica» de la salud pública infantil. En el texto, la entidad destaca las condiciones laborales adversas, la falta de profesionales y el impacto que estas problemáticas tienen en la atención de niños, niñas y adolescentes.
Formación extensa, salarios insuficientes
La pediatría exige un largo proceso de formación que, según la SAP, dura entre 10 y 12 años si se incluyen subespecialidades. Sin embargo, este esfuerzo no se ve reflejado en una remuneración acorde. Miguel Javier Indart de Arza, presidente de la SAP, señaló que «pese a los logros y reconocimientos alcanzados, la pediatría enfrenta hoy desafíos significativos en un contexto de crisis económica y sanitaria».
Edgardo Flamenco, secretario del Comité de Ejercicio Profesional, añadió que «el 70% de los pediatras se ve obligado a trabajar en múltiples empleos para compensar los bajos salarios». Esta realidad genera estrés, insatisfacción y limita la dedicación a la formación continua, la investigación y la docencia.
Falta de profesionales y servicios debilitados
La SAP subrayó que más del 50% de las residencias pediátricas y subespecialidades no logran completar sus cupos mínimos. Este déficit impacta directamente en áreas críticas como neonatología y terapia intensiva pediátrica, que en varios casos han tenido que cerrar servicios o reprogramar guardias por falta de personal.
La vocal del Comité de Ejercicio Profesional, Natalia Gamba, destacó que decisiones políticas erróneas contribuyeron al éxodo de especialistas hacia sectores mejor remunerados. «Muchos pediatras buscan condiciones laborales dignas fuera del sistema público, lo que agrava la crisis», indicó.
Impacto en la atención y el futuro del sistema
El documento advierte que las consecuencias de esta situación ya están afectando la atención sanitaria de niños y adolescentes, y podrían agravarse si no se implementan soluciones urgentes. Según la SAP, la falta de profesionales y las condiciones laborales precarias comprometen la calidad de la atención y ponen en riesgo el bienestar de las próximas generaciones.
«El futuro de la pediatría demanda soluciones urgentes que garanticen condiciones laborales dignas y remuneraciones acordes al compromiso y formación de los profesionales. Solo así se podrá asegurar un porvenir saludable para las generaciones futuras», concluye el comunicado.
Un llamado a la acción
La SAP instó a las autoridades sanitarias, tanto públicas como privadas, a reconocer a los pediatras como un recurso esencial para la sociedad. «El momento de actuar es ahora», remarcaron, haciendo hincapié en la necesidad de políticas que prioricen la salud infantil como un pilar del bienestar social.
En el marco del Día del Médico, el mensaje de los pediatras refleja no solo una preocupación profesional, sino un llamado de atención sobre un sistema que requiere cambios profundos para garantizar el derecho a la salud de las infancias argentinas.