Monotributo 2024: Aumentos de más del 300% en los montos y nuevas categorías de facturación

Con la aprobación del nuevo paquete fiscal, los topes de facturación y las cuotas del monotributo se incrementan entre un 300% y un 330%. Los monotributistas deberán abonar cuotas mensuales más altas a partir de noviembre de 2024.

El reciente paquete fiscal aprobado por el gobierno argentino trae cambios significativos para los contribuyentes del monotributo. A partir de noviembre de 2024, los topes de facturación y las cuotas mensuales experimentarán un aumento que oscila entre el 300% y el 330%. Esta medida tiene como objetivo evitar que contribuyentes con un mismo nivel de ingresos o incluso menor se vean forzados a pasarse al régimen general, lo que implicaría mayores cargas impositivas.

Los cambios afectan tanto los límites de facturación como los montos mensuales que deben pagar los monotributistas por el concepto de impuesto integrado, aportes jubilatorios y obra social. A continuación, se detallan las nuevas escalas de facturación anuales para cada categoría del monotributo:

  • Categoría A: $6,45 millones.
  • Categoría B: $9,45 millones.
  • Categoría C: $13,25 millones.
  • Categoría D: $16,45 millones.
  • Categoría E: $19,35 millones.
  • Categoría F: $24,25 millones.
  • Categoría G: $29 millones.
  • Categoría H: $44 millones.
  • Categoría I: $49,25 millones.
  • Categoría J: $56,4 millones.
  • Categoría K: $68 millones.

Además de los nuevos límites de facturación, los contribuyentes deberán abonar mayores montos mensuales. Por ejemplo, en la Categoría A, el total a pagar por mes será de $26.600, que incluye un impuesto integrado de $3.000, un aporte previsional de $9.800 y una obra social de $13.000. En las categorías más altas, como la K, los montos ascienden a $867.084,76 mensuales, con variaciones según el tipo de actividad (servicios o comercio de bienes).

Estos cambios buscan ajustarse a la inflación y al incremento generalizado de precios, pero también implican un esfuerzo financiero adicional para los contribuyentes, en especial para aquellos que facturan en los tramos más bajos del monotributo. Según la AFIP, las recategorizaciones serán clave en este nuevo escenario, ya que aquellos que excedan los límites de facturación deberán cambiar de categoría o, en algunos casos, migrar al régimen general, con mayores cargas fiscales.