Día Nacional del Chamamé: celebrando una tradición viva
El 19 de septiembrev una fecha que rinde homenaje al legado del músico y folclorista Mario del Tránsito Cocomarola, figura central en la historia de este género musical tan arraigado en la cultura del litoral.
El chamamé, un estilo musical nacido en el noreste argentino, ha sabido trascender fronteras, generaciones y épocas. Cada 19 de septiembre, se celebra en todo el país el Día Nacional del Chamamé, en conmemoración al fallecimiento de uno de sus más grandes exponentes: Mario del Tránsito Cocomarola. Esta fecha se ha consolidado no solo como un tributo a Cocomarola, sino también como una oportunidad para reafirmar el valor cultural y simbólico de este género musical, cuyo eco resuena en los corazones de quienes lo consideran parte esencial de su identidad.
Mario del Tránsito Cocomarola, nacido en 1918 en San Cosme, Corrientes, es una figura ineludible en la historia del chamamé. A lo largo de su carrera, Cocomarola se destacó por su virtuosismo en el bandoneón y su capacidad para fusionar melodías tradicionales con composiciones propias. Entre sus obras más reconocidas se encuentra el emblemático «Kilómetro 11», que se ha convertido en un himno para los amantes de este género.
El chamamé, que combina raíces guaraníes, españolas y africanas, ha logrado consolidarse como un símbolo de la música folclórica argentina, en especial en las provincias del litoral como Corrientes y Misiones. Este género musical, a menudo acompañado de acordeón, guitarra y bandoneón, narra historias de amor, nostalgia y conexión con la naturaleza, reflejando la esencia del hombre y la mujer del campo.
Desde que la Unesco lo declaró Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en 2020, el chamamé ha ganado un renovado protagonismo, tanto en el ámbito local como internacional. Cada año, festivales y eventos en diversas provincias argentinas celebran esta expresión artística, reuniendo a músicos, bailarines y aficionados en torno a una tradición que se mantiene más viva que nunca.
El Día Nacional del Chamamé no solo es un reconocimiento a la obra de Cocomarola, sino también una invitación a mantener vivas las tradiciones y a transmitirlas a las nuevas generaciones. En un mundo donde las influencias globales tienden a dominar, esta celebración se convierte en un acto de resistencia cultural, que refuerza el orgullo por lo propio y lo auténtico.