El fenómeno climático «La Niña» podría impactar significativamente en Argentina

Con la inminente llegada de "La Niña" a Sudamérica, el pais se prepara para enfrentar una temporada marcada por sequías prolongadas r y un impacto significativo en la agricultura y otras áreas clave.

La llegada del fenómeno «La Niña» a Sudamérica parece inminente, y con ella se anticipan cambios importantes en el clima que afectarán a Argentina en la primavera y el verano de 2024-2025. Según los últimos informes de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) de los Estados Unidos, hay un 66% de probabilidad de que «La Niña» se instale entre septiembre y octubre. Este fenómeno meteorológico tiene el potencial de prolongarse hasta enero, con una posibilidad del 74% de mantenerse activo durante ese periodo.

Diversas agencias meteorológicas internacionales, como el International Research Institute for Climate and Society (IRI) y la Oficina Meteorológica de Japón, también respaldan la alta probabilidad de que «La Niña» llegue a Sudamérica en los próximos meses. Para Argentina, su presencia podría significar una serie de consecuencias tanto para el sector agrícola como para el clima en general.

¿Qué es «La Niña»?

«La Niña» es la fase fría del ciclo climático conocido como El Niño-Oscilación del Sur (ENOS). Este fenómeno se caracteriza por el enfriamiento anómalo de las aguas del océano Pacífico central y oriental, lo que produce cambios significativos en los patrones de vientos, precipitaciones y temperaturas en varias partes del mundo. La intensificación de los vientos alisios en el Pacífico provoca que las aguas cálidas se desplacen hacia el oeste, dejando el Pacífico central y oriental más fríos de lo habitual.

Este cambio en la temperatura del océano afecta a la atmósfera y, por lo tanto, a las condiciones climáticas globales. En Sudamérica, «La Niña» suele estar asociada con condiciones más secas y frías en comparación con su contraparte, «El Niño», que genera lluvias más abundantes.

Impacto en Argentina

Para Argentina, la llegada de «La Niña» podría tener un impacto profundo en la temporada primavera-verano. Los informes sugieren que este fenómeno traerá consigo una disminución en las precipitaciones, lo que afectará principalmente al sector agropecuario, una parte vital de la economía del país. Las regiones agrícolas, como la pampa húmeda, podrían enfrentar una sequía prolongada, lo que afectaría los cultivos y la producción ganadera.

Además, zonas turísticas como Córdoba, ya afectadas por incendios, podrían sufrir aún más debido a la falta de lluvias. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ha señalado que, de confirmarse «La Niña», la probabilidad de sequía aumentaría en varias regiones del país.

Pronósticos para la temporada

Según los modelos estadísticos y dinámicos del SMN, hay un 41% de probabilidad de que «La Niña» se desarrolle en el trimestre septiembre-noviembre de 2024, mientras que las condiciones neutrales tienen un 55% de probabilidad. Esto significa que aunque el país podría evitar los extremos de calor del año pasado, enfrentará una temporada más seca y con mayor riesgo de heladas, afectando también a otras áreas como el turismo y la energía.

En resumen, «La Niña» plantea un desafío importante para Argentina, que deberá prepararse para enfrentar los efectos de este fenómeno climático en múltiples sectores, desde la agricultura hasta el turismo, en una temporada que promete ser más fría y seca de lo habitual.