La economía argentina sigue en retroceso: la actividad cayó un 3,9% interanual en junio
A pesar de algunas subas en sectores específicos, la economía argentina continuó su declive en junio, con una caída del 3,9% en comparación interanual, según el INDEC. Construcción e Industria fueron los más afectados.
La economía argentina sigue sin mostrar señales de recuperación sólida. Según los datos del Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) publicados por el INDEC, en junio de 2024 se registró una caída del 3,9% en comparación con el mismo mes del año anterior. Este descenso se da en un contexto de crisis persistente, donde solo unos pocos sectores lograron crecer, mientras que otros, fundamentales para la economía, siguen en franco deterioro.
El panorama económico de Argentina en junio mostró una tendencia preocupante. Si bien seis sectores de actividad presentaron subas interanuales, como la Agricultura, ganadería, caza y silvicultura (+82,4%) y Explotación de minas y canteras (+4,6%), la economía en general sufrió una caída del 3,9% en comparación con junio de 2023. Además, en la medición desestacionalizada, la contracción fue del 0,3% respecto a mayo, lo que evidencia un estancamiento en la recuperación económica.
Entre los sectores que más sufrieron, se destacaron la Construcción, con una caída del 23,6%, y la Industria manufacturera, que retrocedió un 20,4% interanual. Estas dos áreas, junto con el Comercio mayorista, minorista y reparaciones, que cayó un 18,6%, le restaron 6,8 puntos porcentuales a la variación interanual del EMAE, mostrando el impacto negativo que tienen sobre el conjunto de la economía.
El Gobierno, consciente de este difícil escenario, estima que la actividad económica cerrará el año con una baja del 3,5%, según las proyecciones preliminares incluidas en el anticipo de la Ley de Presupuesto que se presentará en septiembre. Esta previsión refleja el pesimismo sobre una posible recuperación a corto plazo, en un contexto donde la economía parece no encontrar el impulso necesario para revertir la tendencia negativa.
Por otro lado, algunas subas en sectores específicos, como la Agricultura y la Pesca (+34,8%), aportaron cierto alivio, aunque insuficiente para contrarrestar las caídas en áreas clave. En minería, el aumento del 4,6% fue impulsado por la mayor producción de litio, gas y petróleo, estos dos últimos vinculados a la explotación de Vaca Muerta, lo que muestra el potencial de ciertos recursos estratégicos, pero que aún no logran tener un impacto significativo en la economía general.
En este contexto de incertidumbre, las palabras del ministro de Economía, Luis Caputo, buscan generar confianza entre los empresarios, instándolos a invertir y participar en el blanqueo de capitales. Sin embargo, la realidad muestra un escenario desafiante, donde las medidas gubernamentales aún no han logrado revertir la tendencia negativa que afecta a sectores clave de la economía argentina. La evolución en los próximos meses será crucial para determinar si estas subas sectoriales pueden convertirse en un motor de recuperación más amplio y sostenido.