Desempleo por la recesión en la era Milei: 140 mil trabajadores sin empleo formal
Entre noviembre y abril, las políticas económicas del gobierno de Javier Milei han dejado a casi 140 mil personas sin trabajo formal. Los sectores público y privado son los más afectados.
En medio de una profunda recesión económica, el gobierno de Javier Milei ha visto la pérdida de casi 140 mil empleos formales entre noviembre de 2023 y abril de 2024, según datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA). De estos, 112 mil pertenecían al sector privado y 25 mil al sector público.
El impacto de las políticas económicas implementadas por el gobierno de Javier Milei se refleja en el mercado laboral, con una significativa reducción de puestos de trabajo formales. Los datos de SIPA indican que, además del sector privado y el sector público, también se han visto afectados los trabajadores de casas particulares y los independientes con monotributo social. Por otro lado, los monotributistas y autónomos han experimentado leves incrementos en sus registros, aunque insuficientes para compensar las pérdidas generales.
El presidente Javier Milei ha defendido sus políticas de ajuste fiscal, argumentando que son necesarias para combatir la inflación. En una reciente declaración, Milei afirmó: «Hicimos el ajuste fiscal más grande de la historia de la humanidad. La motosierra no para nunca, estamos todo el tiempo poniéndole combustible». Esta declaración subraya la determinación del gobierno de seguir con sus medidas de austeridad.
El presidente ha prometido implementar 4.000 reformas adicionales durante el resto de su mandato, con el objetivo de convertir a Argentina en «el país más libre del mundo» en un plazo de 40 años. Sin embargo, sus políticas han sido criticadas por provocar un aumento significativo del desempleo y una caída en los salarios reales, que no han logrado recuperar la pérdida causada por la devaluación de diciembre anunciada por el ministro de Economía, Luis Caputo.
El impacto de las políticas económicas de Javier Milei continúa generando controversia y debate en Argentina. Mientras el gobierno se enfoca en sus objetivos de largo plazo, la realidad inmediata muestra un escenario complicado para miles de trabajadores que han perdido sus empleos. La promesa de un futuro económico más libre y próspero contrasta con las dificultades actuales, planteando serios desafíos tanto para los formuladores de políticas como para los ciudadanos afectados.