Alarmante predicción: la mitad de la población mundial sufrirá de miopía para 2050
La creciente exposición a las pantallas y la falta de actividades al aire libre han llevado a los expertos a estimar que la miopía será una condición prevalente para mediados del siglo. Las recomendaciones incluyen reducir el tiempo frente a dispositivos y aumentar las actividades al aire libre.
El aumento del tiempo que las personas pasan frente a pantallas, ya sea por motivos laborales o de ocio, junto con la disminución de actividades al aire libre, ha llevado a diversos científicos a estimar que, para 2050, la mitad de la población mundial podría sufrir de miopía. “Ya es un problema de salud pública”, coinciden en expresar los expertos.
En países como China, Corea del Sur, Japón y Singapur, alrededor del 80% de los jóvenes que terminan la secundaria ya presentan miopía. Las proyecciones indican que para 2050, la prevalencia de miopía en el este de África no superará el 23%, mientras que en los países de altos ingresos de la región de Asia y el Pacífico, dos de cada tres personas sufrirán esta afección.
Los expertos explican que, aunque la luz de las pantallas no daña el ojo directamente, el abuso de las pantallas sí favorece el desarrollo de la miopía. “Si usáramos las pantallas de buena manera, no habría problema, pero los niños ahora abusan más de ellas”, afirmaron.
El aumento de la miopía es una tendencia alarmante que afecta a todo el mundo. Los cambios en los estilos de vida, especialmente en los jóvenes, han contribuido a este incremento. La reducción de tiempo al aire libre y el aumento del tiempo frente a dispositivos electrónicos son factores clave en este fenómeno.
La miopía es más que un problema de visión; puede llevar a complicaciones más graves como el desprendimiento de retina, el glaucoma y la degeneración macular. Estas condiciones pueden causar pérdida de visión permanente si no se tratan adecuadamente.
Para combatir esta creciente epidemia, los especialistas recomiendan fomentar actividades al aire libre y reducir el tiempo de uso de pantallas, especialmente en niños y adolescentes. Estudios han demostrado que pasar tiempo al aire libre puede reducir el riesgo de desarrollar miopía.
Además, se sugiere el uso de la regla 20-20-20, que consiste en tomar un descanso de 20 segundos cada 20 minutos mirando algo a 20 pies de distancia (aproximadamente 6 metros). Esta práctica ayuda a reducir la fatiga ocular y puede contribuir a prevenir la miopía.
Ante la proyección de que la mitad de la población mundial podría sufrir de miopía para 2050, es esencial tomar medidas preventivas. Fomentar actividades al aire libre y limitar el tiempo frente a las pantallas son pasos fundamentales para proteger la salud visual de las futuras generaciones. La comunidad médica y educativa debe unirse en esta causa para evitar que esta predicción se convierta en una realidad.