Los datos mostraron que un tercio de los usuarios de Internet en Francia ha experimentado efectos negativos debido al uso de pantallas fuera del ámbito laboral o educativo. Los jóvenes son los más afectados, con el 57% de los menores de 20 años y el 49% de las personas entre 20 y 34 años reportando efectos nocivos.
Además de la reducción del sueño, otros efectos negativos mencionados incluyen descuidar aficiones y desarrollar un deseo obsesivo de mirar pantallas. La encuesta también destacó que un tercio de los usuarios intentó limitar su uso de pantallas, aunque un 7% de ellos no logró hacerlo.
El estudio también encontró que el uso excesivo de pantallas puede causar conflictos y depresión. Aproximadamente el 5% de los usuarios declaró haber tenido conflictos debido a las pantallas y un 4% se sintió deprimido por el uso del teléfono o la computadora, con una prevalencia mayor en jóvenes de 15 a 19 años, de los cuales el 11% reportó sentirse deprimido.
El impacto de las pantallas también se extiende a las dinámicas familiares, ya que el 9% de las personas que viven con al menos un menor reportaron conflictos familiares semanales debido al uso de pantallas.
Según Insee, el uso de pantallas puede contrarrestar el impacto positivo de la edad en el bienestar, ya que la sensación de depresión en personas de 20 a 34 años es solo 0.2 puntos inferior a la media de los adultos.
Aunque varios estudios han examinado los efectos de las pantallas en la salud, los resultados no son concluyentes. Un amplio estudio de la Universidad de Oxford el año pasado no encontró evidencia irrefutable que relacione la tecnología con el bienestar. No obstante, los investigadores enfatizan la necesidad de más datos de las empresas tecnológicas para entender mejor el impacto del uso de Internet en la salud.