Las claves del pedido de perpetua para cada uno de los rugbiers
Tras precisar el accionar de cada uno de los rugbiernes, los fiscales Juan Manuel Dávila y Gustavo García pidieron la prisión perpetua para los ocho rugbiers juzgados por el crimen de Fernando Báez Sosa.
Los fiscales Juan Manuel Dávila y Gustavo García pidieron ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Dolores la prisión perpetua para los ocho acusados del crimen de Fernando Báez Sosa tras precisar en su alegato de cierre dónde se encontraba cada uno de ellos al momento de la agresión y cómo intervinieron en el ataque frente a «Le Brique».
Blas Cinalli
Consideraron que «no hay dudas de que Blas Cinalli le pegó» a Fernando. Dávila rechazó el presunto contacto en el interior del boliche al que se refirió este acusado al declarar para tratar de justificar el hallazgo de material genético suyo en un dedo meñique de la víctima. Dijo que «lo único que intentó fue ponerse en una mejor situación procesal». De acuerdo al video que registró el ataque desde enfrente, se vio cómo es «agarrado de la pierna» mientras le pegaba a Tomás D´Alessandro, amigo de la víctima, y que luego se dirigió hacia la calle y regresó a la parte trasera del auto.
Enzo Comelli
A partir del testimonio de Juan Bautista Besuzzo, amigo de Fernando, señalaron a Enzo Comelli como quien le «propina un golpe de puño» desde atrás a la víctima, quien «cae al piso casi inconsciente». Le pegó también a otro amigo, lo que «acredita que todos hicieron todo». En los videos se observa que le pegó a D´Alessandro y luego a otro de los amigos de Fernando que cayó sobre el capot de un auto.
Luciano Pertossi
Luciano Pertossi salió de la parte trasera del auto donde estaba D´Alessandro y fue hacia el lugar donde le estaban pegando a Fernando. Según testigos, «es una de las personas que le pega en el piso», y además se halló ADN compatible con la víctima en un pantalón gris que usaba él.
Lucas Pertossi
Un video mostró a Lucas Pertossi en «el sector donde le están pegando a Fernando». Es, además, la persona que filmó el inicio del ataque, que se ubicó a lado de Fernando y uno de los que le pegó. «Es imposible que no le haya pegado»., dijo Dávila y agregó: «Aparte de agredir a Fernando es una de las personas que también libera la zona a los efectos de que el ataque se pueda realizar (…) Se queda observando qué es lo que ocurría» y a envió el audio de «caducó» al grupo que compartían los acusados.
Matías Benicelli
«Sale del sector donde le están pegando a Fernando y se dirige hacia la parte de adelante», precisó Dávila sobre Matías Benicelli, quien indicó que este acusado «le pegó a Fernando». Además, en sus zapatillas, el pantalón y la camisa que tenía colocados «tenían sangre» de la víctima.
Ayrton Viollaz
«Sale del sector donde le estaban pegando a Fernando y se dirige a la parte delantera del auto donde se interpone a todo aquel que se quería acercar», dijo García sobre Ayrton Viollaz. «No hay ninguna duda que agredió físicamente a Fernando», sostuvo, por su parte, Dávila, y explicó que la acusación guarda relación con las lesiones que presentaba en sus nudillos.
Ciro Pertossi
Ciro Pertossi golpeó de manera simultánea con Comelli a la víctima en el inicio del ataque. Le pegó también a un amigo de Fernando, lo que acredita, según los fiscales, que «todos hicieron todo». Según el testimonio de Lucas Filardi es uno de los que «le pegó patadas en el piso a Fernando». Tras el ataque, «con su mano izquierda se limpia los nudillos de la derecha y una vez que culmina, con el uso de su boca también se limpia sus manos».
Máximo Thomsen
Al igual que a Ciro Pertossi, a Máximo Thomsen se lo vio «todo el tiempo en el sector donde le están pegando a Fernando». Dávila se refirió a «la ira y la furia» luego de recibir un golpe de Fernando adentro del boliche. Sostuvieron los fiscales que, según testigos, fue «el que más le pegó a la víctima» en el piso, con «puntinazos» y «patadas en la cabeza» con las que «se aseguraba que no se levantase». A los testimonios sumaron la prueba pericial, que halló sangre de Fernando en sus zapatillas. Además, una pericia scopométrica determinó que «dejó la impresión en el maxilar izquierdo de Fernando».