Piden apartar a la jueza que investiga el caso Astudillo por entorpecer «la búsqueda de la verdad»
Un fiscal general ante la Cámara de Casación solicitó hoy que se aparte a la jueza federal bahiense María Gabriel Marrón de la investigación por la desaparición y muerte de Facundo Astudillo Castro, cuyo cuerpo fue hallado en la localidad bonaerense de General Cerri, al considerar que “no practicó ninguna medida conducente” e incorporó a la causa “elementos que en lugar de esclarecer, entorpecen la búsqueda de la verdad real”.
Se trata del fiscal Javier De Luca, quien a través de un dictamen de 16 páginas acompañó el pedido de los fiscales Horacio Azzolin y Andrés Heim ante la Cámara Federal de Casación, quienes ya habían solicitado el apartamiento de la jueza Marrón.
La recusación fue rechazada en marzo pasado por la Cámara Federal y en abril la Cámara de Apelaciones denegó la apelación presentada por los representantes del Ministerio Público Fiscal frente a esa decisión.
A raíz de ello, Azzolin y Heim interpusieron un recurso de queja ante la Sala I del Tribunal de Alzada, y en ese marco intervino De Luca, fiscal general y titular de la fiscalía 4 ante la Cámara de Casación Penal.
De acuerdo con lo informado por el MPF en el sitio institucional www.fiscales.gob.ar, la misma sala también abrió para que sea tratado otro recurso de queja presentado por los fiscales, a raíz de la decisión de la jueza Marrón de ordenar un informe pericial mientras la investigación estaba delegada en ellos.
«La descripción de las circunstancias del caso en estudio no deja lugar a dudas respecto de que la jueza de la causa ya tiene una posición tomada (un prejuicio) sobre cómo se sucedieron los acontecimientos que derivaron en la muerte del joven Astudillo, lo cual es totalmente incompatible con la actitud y apertura mental que debe adoptar cualquier magistrado en la etapa de investigación o averiguación de un posible crimen», manifestó en su dictamen el fiscal De Luca.
En ese sentido, el fiscal señaló que la magistrada “no practicó ninguna medida conducente, denegó las propuestas por la fiscalía, hizo perder un tiempo precioso a la pesquisa (´el tiempo que pasa es la verdad que huye´) e incorporó elementos que en lugar de esclarecer, entorpecen la búsqueda de la verdad real”.
Luego, agregó que “sus decisiones terminaron produciendo obstáculos y desvíos de la investigación hacia un único rumbo, el de su hipótesis».
De acuerdo con el fiscal general, para Marrón «toda hipótesis que se aparte del mero ‘accidente’ y se dirija hacia la posibilidad de un homicidio, doloso o culposo, o un encubrimiento de éste, es inmediatamente negada».
«A lo largo de toda esta etapa investigativa, la magistrada que esta parte recusa ha demostrado una actitud refractaria hacia todas las medidas de prueba que la fiscalía solicitara (…) ello ocurrió cuando se intentó avanzar en líneas de investigación que pudieran comprometer la actuación de las fuerzas de seguridad del lugar en los hechos».
Por todo lo argumentado, el fiscal De Luca solicitó que se haga lugar al recurso de casación interpuesto por el MPF y se aparte a la jueza Marrón de la causa.
Facundo Astudillo Castro (20) fue visto por última vez el 30 de abril del año pasado cuando salió de su casa de la ciudad bonaerense de Pedro Luro rumbo a Bahía Blanca para ver a su novia.
Tras ser interceptado por la Policía por violar el aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO), nada más se supo de él hasta el 15 de agosto, cuando sus restos fueron hallados en un cangrejal de la localidad bonaerense de General Cerri.
La autopsia realizada por expertos del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) determinó que el joven murió como consecuencia de una «asfixia por sumersión».
En tanto, hace dos semanas un peritaje realizado por expertos en rastros de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) determinó que la ropa hallada en la mochila de Facundo estaba dañada «con algún elemento químico» y presentaba «cortes y puntazos».