Crecen más de 21% los despachos de cemento en julio
Los despachos de cemento registraron un crecimiento del 21,4% interanual en julio, informó hoy la cámara de fabricantes del insumo, que elevó ahora a 19% su pronóstico de expansión para todo 2021, cuando el mes pasado se proyectaba un aumento anual de 15,1% y en enero pasado se estimaba un alza de sólo 5,7%.
La mejora de la demanda interna registrada por la Asociación de Fabricantes de Cemento Portland (AFCP) es de una magnitud muy superior a la esperada meses atrás, y anotó en los primeros siete meses del año un salto interanual de 40%.
Este año la industria cementera prevé despachar 11,7 millones de toneladas (450.000 más de lo que se vaticinaba en junio).
De ese modo se espera dejar atrás tres años consecutivos de caídas y sobrepasar los niveles de pre pandemia: en 2019 se despacharon 11,1 millones de toneladas.
La mejoría en la actividad se produce tras el derrumbe del año pasado, que limitó los despachos a 9,8 millones de toneladas, y se convertirá en un crecimiento real, según la expectativa de los fabricantes (Loma Negra, Holcim, Cementos Avellaneda y PCR).
Esas compañías confían en que se consolide una paulatina recuperación de la construcción en los próximos meses, tanto en las obras privadas como en las públicas de infraestructura (vial y de viviendas), en todo el país.
Por lo pronto, durante enero-julio se acumularon despachos totales por 6,5 millones de toneladas (99,8% dirigidos al mercado local).
La capacidad instalada actual de la industria permitiría producir 15,3 millones de toneladas anuales de cemento (1,27 millón por mes) y fue aprovechada en julio (con 1.053.000 toneladas despachadas) en un 82,9%, cuando el mes anterior la proporción fue de 76,3%.
El ritmo de la actividad del sector en los últimos meses contrasta con el freno experimentado durante el momento pico de la cuarentena por el coronavirus: en mayo de 2020 la capacidad fabril sólo se utilizó en un 52%.
El repunte reciente de la industria cementera no alcanzará, sin embargo, para equiparar los máximos niveles alcanzados en los años previos al desplome que comenzó en agosto de 2019, tras la devaluación del peso luego de las elecciones primarias de ese año.
Desde entonces se agravó el cuadro recesivo iniciado en 2018, año en que los envíos al mercado decrecieron 1% frente a los de 2017, según las estadísticas de la AFCP.
En todo 2019 el descenso interanual de los despachos de cemento fue de 6,1%, mientras en 2020 pasado se anotó una baja de 11,1% frente a los doce meses previos.