Firme respaldo de todas las provincias a la estrategia nacional contra la pandemia
Los ministros y ministras de Salud de todas las provincias dijeron que «la estrategia de amesetamiento de la curva de contagios mediante el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) ha sido, sin lugar a dudas, una estrategia efectiva».
Los ministros y ministras de Salud de todas las provincias respaldaron la política sanitaria del Gobierno Nacional frente a la pandemia de coronavirus y dijeron que «la estrategia de amesetamiento de la curva de contagios mediante el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) ha sido, sin lugar a dudas, una estrategia efectiva».
Los funcionarios provinciales afirmaron en un documento conjunto que gracias a esa estrategia «se logró el efecto buscado: tener un sistema de salud preparado y con mayor capacidad de respuesta», según indicaron este viernes fuentes del Ministerio de Salud de la Nación.
«El colapso sanitario registrado en diversos países del mundo obedeció al desborde que sufrieron los sistemas hospitalarios a raíz de la pandemia de la Covid-19, y la propagación de este virus puso tales sistemas al límite, provocando que se vieran sobrepasados y paralizados, especialmente por falta de infraestructura, personal y otros medios necesarios para afrontar las circunstancias», indicó el documento suscripto por los ministros provinciales.
«En nuestro país, desde el comienzo de la pandemia y con la detección del primer caso positivo, el día 3 de marzo pasado, se pusieron en marcha una serie de acciones comandadas por el Ministerio de Salud de la Nación, que conduce Ginés González García, que transcurridos 7 meses han permitido lograr un abordaje adecuado de la contingencia sanitaria», señaló el escrito.
Los ministros también recordaron que, en ese contexto, «las jurisdicciones pudieron incrementar (duplicando y hasta triplicando) las capacidades de nuestras terapias intensivas, con la incorporación de equipamiento aportado en su mayor parte por el Ministerio de Salud de la Nación, en base a un criterio de equidad».
Los ministros destacaron, además, la política de descentralización de los laboratorios, que permitió «dotar a cada una de las provincias del equipamiento necesario (termocicladores en tiempo real) para hacer los diagnósticos de la enfermedad en los pacientes».
«Esta medida logró aumentar significativamente la cantidad de testeos, acortando los tiempos en el diagnóstico», agregaron.
Y dijeron que, «así las cosas, se logró un objetivo histórico, muchas veces pregonado y nunca concretado: tener un sistema de salud único, conformado por los subsectores público y privado, merced a un acuerdo de trabajo conjunto, en virtud del cual se unificaron criterios y se optimizó la capacidad de respuesta».
Los ministros explicaron en el documento que una pandemia «es un evento único y extraordinario, más aun cuando se trata de una enfermedad nueva, que no se conoce y para la cual no hay estrategias de abordaje previamente diseñadas».
Y acotaron que «la dinámica de la enfermedad nos obligó a tomar decisiones de alto grado de impacto, no solo sobre el sistema sanitario sino también sobre otras áreas del Estado, y esas decisiones nunca fueron tomadas unilateralmente, sino que siempre fueron discutidas, consensuadas y aplicadas con el acuerdo del conjunto de ministros y ministras de Salud de cada una de las jurisdicciones del país».
Los ministros ratificaron que ese mecanismo en la toma de decisiones «fue algo totalmente inédito e innovador dentro de nuestro sistema, que permitió que se materializara un federalismo real, gracias al acompañamiento permanente que recibimos desde la Nación, no solo en lo referido a equipamiento, sino también en la presencia permanente de funcionarios y equipos técnicos, cuando así lo requerimos».
«Los equipos itinerantes de profesionales de la salud que se conformaron (integrados por médicos, enfermeros, kinesiólogos, bioquímicos y técnicos, entre otros) se pusieron a disposición de cada una de las jurisdicciones, a fin de dar el apoyo necesario a los trabajadores de la salud que están sufriendo un gran desgaste y cansancio, no solo físico sino también psicológico, debido a la intensidad y extensión de la pandemia», señalaron en el documento.
En relación al debate generado respecto a la carga de datos, indicaron que «se ha hecho responsable al Ministerio de Salud de la Nación, cuando la responsabilidad exclusiva es de cada una de las jurisdicciones, que cargan sus propios datos en el sistema nacional de vigilancia, donde algunas no pudieron llevar la carga en los tiempos adecuados».
«La demora en la carga de los testeos negativos -indicaron- dio un alto porcentaje de positividad en las muestras, pero desde la cartera sanitaria nacional se nos han brindado las herramientas para corregir dicha situación».
«Por todo lo expuesto es que manifestamos, desde cada una de las provincias, nuestro absoluto respaldo y acompañamiento a las políticas sanitarias implementadas por el Ministerio de Salud de la Nación, agradeciendo el acompañamiento permanente y el respaldo con el que contamos ante las situaciones críticas que estamos afrontando en cada una de las jurisdicciones», puntualizó el documento.
El pronunciamiento lleva las firmas de Daniel Gollán (Buenos Aires); Claudia Palladino (Catamarca); Paola Benítez (Chaco); Fabián Alejandro Puratich (Chubut); Fernán Quirós (Ciudad Autónoma de Buenos Aires); Diego Cardozo (Córdoba); Ricardo Cardozo (Corrientes); Sonia Velázquez (Entre Ríos); Edgar Crocci (Formosa); Gustavo Bouhid (Jujuy) y Mario Rubén Kohan (La Pampa).
También suscribieron Juan Carlos Vergara (La Rioja); Ana María Nadal (Mendoza); Oscar Alarcón (Misiones); Andrea Peve (Neuquén); Fabián Zgaib (Río Negro); Juan José Esteban (Salta); Silvia Venerando (San Juan); Silvia Sosa Araujo (San Luis); Claudio García (Santa Cruz); Sonia Martorano (Santa Fe); Natividad Nassif (Santiago del Estero); Judith Vigilio (Tierra del Fuego e Islas del Atlántico Sur) y Rossana Chahla (Tucumán).