Clausuras y detenidos en Santa Fe por infracciones al distanciamiento social
En la capital de la provincia hubo esta madrugada un operativo de inspectores y policías que permitió desarticular cuatro fiestas que se desarrollaban en domicilios particulares, una de ellas con 90 participantes.
Dos conocidos locales nocturnos de la ciudad de Reconquista fueron clausurados el fin de semana por infringir el distanciamiento social dispuesto para contener contagios de coronavirus, y una decena de personas fueron detenidas por participar de una fiesta clandestina en un bar de la ciudad de Santa Fe, informaron hoy voceros comunales y policiales.
Fuentes comunales informaron que en una casa de Ayacucho al 2600 había 90 personas en una fiesta y la policía detuvo a dos personas, una de ellas por portación de arma blanca.
También se labraron actas en Quiloazas al 6400 del barrio Colastiné, donde había 10 personas; en Perón al 4200, con 42 participantes; y en 9 de Julio al 1300, con 15 personas.
En el caso de Reconquista, ciudad ubicada 320 kilómetros al norte de la capital provincial, la municipalidad dispuso ayer la clausura preventiva de dos locales comerciales nocturnos situados en la zona céntrica.
El primero de los casos involucró a Pancho Villa, ubicado en calle Iriondo al 600, «por no respetar el distanciamiento social, preventivo y obligatorio».
Luego, inspectores comunales que actuaron acompañados por personal policial se dirigieron a Harrison Bar, situado en calle Ley 1420 al 500, en su caso por no respetar el horario de cierre.
En cuanto a la fiesta clandestina detectada el sábado a la madrugada en la ciudad de Santa Fe, se trató de un bar ubicado en calle Chacabuco al 1600, en barrio Candioti.
Allí, por un llamado de vecinos al 911 concurrió personal policial y de la Secretaría de Control municipal y detuvo a una decena de personas por violar la normativa que esa clase de locales debe cerrar sus puertas a la medianoche.
Voceros comunales dijeron que los inspectores labraron el acta alrededor de las 3 de la madrugada y que el local, con esa infracción, quedó clausurado.
Las diez personas que se encontraban en el lugar, entre ellos el dueño, fueron trasladadas hasta la comisaría 3ra. por orden de la Fiscal en turno del Ministerio Público de la Acusación (MPA), María Laura Martí.
Fuentes judiciales informaron que cuando los inspectores y agentes policiales llamaron a la puerta no recibieron respuesta, por lo que entraron por la fuerza y encontraron las luces apagadas y los participantes de la fiesta escondidos en distintos sectores del local.