En la crisis del coronavirus «lo único que está claro es la incertidumbre», según Pepe Mujica
El ex gobernante uruguayo diferenció a los países que tomaron en serio a la pandemia y aplicaron medidas tempranas para frenarla, de aquellos que despreciaron a la Covid-19 y la tomaron como una «gripecita».
El ex presidente de Uruguay José Pepe Mujica consideró que lo único que está claro en la crisis por la pandemia de coronavirus, que ya causó 4 millones de contagios y casi 278.000 muertes en el mundo, es la «incertidumbre», a la vez que destacó la labor conjunta de expertos y políticos.
“Absolutamente nadie tiene claro nada, lo único que está claro es la incertidumbre”, dijo Mujica en un diálogo con el programa La Pizarra en la AM750.
Para el ex mandatario y actual senador del progresista Frente Amplio, existieron contradicciones médicas y sanitarias en la gestión del brote porque todo se va descubriendo «sobre la marcha».
Por eso, insistió en la importancia del trabajo conjunto de expertos y políticos, aunque de forma equilibrada.
«Yo creo que los expertos no deben sustituir a la política y la política no debe ignorar la opinión de los expertos», opinó Mujica, quien reconoció que en última instancia las decisiones son «siempre» políticas.
«El problema es quién las toma, cómo se toman y cómo reflejan el sentido de la mayoría de la gente», agregó.
En ese sentido, el ex gobernante uruguayo diferenció a los países que tomaron en serio a la pandemia y aplicaron medidas tempranas para frenarla, de aquellos que despreciaron a la Covid-19 y la tomaron como una «gripecita», lo que llevó al contagio masivo de sus poblaciones.
«Las consecuencias están a la vista y son desastrosas», manifestó Mujica, quien resaltó el caso de Brasil, el país más golpeado por el nuevo coronavirus en América Latina.
A su criterio, esa subestimación se dio en el gigante sudamericano por el «fanatismo» y la «ausencia total de sentido autocrítico» del gobierno del presidente Jair Bolsonaro, mientras que en Inglaterra señaló que cometieron el mismo error «pero por lo menos después recapitularon».
Como ejemplo opuesto, Mujica citó el caso de Argentina y reconoció la labor de su presidente, Alberto Fernández, por haber priorizado la batalla contra la enfermedad.
«No obra como un fanático, tiene sus convencimientos propios, pero está en una situación muy difícil», indicó el ex mandatario, en referencia a un contexto nacional marcado tanto por la crisis sanitaria como por la económica.
Si bien Mujica consideró que Fernández es el «indicado» para llevar a la Argentina adelante en la negociación de la deuda externa, mostró sus dudas sobre lo qué sucederá con la economía global.
Frente al rebote rápido anhelado por algunos y una crisis peor que la de 1930 vaticinada por otros, el ex presidente uruguayo volvió a afirmar que nada está claro.
«La humanidad no estaba lista, la humanidad se tiene que ir haciendo lista en el camino, está sufriendo y no tiene mucho tiempo para adaptarse», opinó.
Asimismo, Mujica consideró que la modernidad y el avance tecnológico provocaron un conjunto de comodidades que «paradójicamente» crearon en los individuos una fragilidad y una debilidad que «horrorizaría» a cualquier hombre antiguo.
«Si la especie humana fuera tan débil no habría llegado hasta acá, seguramente se habría quedado por el camino», sentenció.
No obstante, advirtió que la pandemia puede también hacer surgir un «neonacionalismo industrialista» en las áreas desarrolladas del planeta porque el contexto de crisis hará crecer el inconformismo que estaba presente, a su criterio, en las clases medias.
«Esto del virus no va a eliminar eso, por el contrario, van aparecer posturas un poco demagógicas tratando de encauzar esa disconformidad que está ahí en esas clases medias que aspiran a más, y que hoy están congeladas», concluyó.