Violencia de género sin freno: hubo cuatro femicidios en las últimas horas
Navila Garay, la adolescente de 15 años que fue encontrada enterrada en una quinta de la localidad bonaerense de Chascomús, murió a causa de múltiples fracturas de cráneo, aparentemente a causa de golpes, mientras que no se hallaron rastros de que haya sido abusada sexualmente.
Bertoletti sostuvo que «está acreditado» que la chica llegó en un remís a la casa del único detenido por el caso, Néstor Garay, de 51 años, en la noche de su desaparición, y aseguró que el hombre «es primo lejano» de la madre de Navila.
Al reconstruir la forma en la que fue descubierta el crimen, reveló que Garay llamó a la dueña de la quinta en la que fue encontrada el cuerpo de la menor para avisarle que había enterrado un perro en el lugar. El hombre, que trabaja como parquero en esa finca y en otras de la zona, sabía que la mujer, que no vive en el lugar sino en el Gran Buenos Aires, iba a acudir a la finca durante el fin de semana.
«A la mujer le pareció demasiado grande el lugar para un perro y además le llamó la atención la coincidencia del apellido del parquero con la de la chica desaparecida, por lo que llamó a la Policía», indicó.
Trascendió que al ser arrestado, Garay le dijo a la Policía que Navila intentó extorsionarlo y denunciarlo por acoso, en el momento en el que en un ataque de ira la mató a golpes.
En tanto, Débora, la madre de la adolescente asesinada, definió al único detenido por el caso como «una basura, un abusador y un pedófilo». La mujer sostuvo que Néstor Garay tiene un primo «relacionado con el tema de los prostíbulos».
En declaraciones a la prensa, Débora reveló que el detenido llamaba constantemente a su hija, según lo que le dijo el novio de la adolescente, aunque ignora el motivo.
Los restos descuartizados de una joven de 18 años que había desaparecido el jueves pasado fueron encontrados en las últimas horas en el río Limay, cerca de la localidad neuquina de Plottier. El cadáver cercenado de Laura Brisa López fue hallado en la zona de Los Espigones, a la altura del paraje de China Muerta.
La autopsia realizada a la joven, que era conocida como «Cielo», permitió establecer que sufrió dos traumatismos de cráneo y dos fracturas, como posibles causas del deceso. Así lo indicó el fiscal general José Gerez, quien en conferencia de prensa expresó: «Estamos conmovido ante un hecho brutal que tenemos que investigar y esclarecer para darle una respuesta a la sociedad y, particularmente, a la familia».
El funcionario indicó que por el momento no había detenidos en torno al caso, aunque admitió que «sí hay sospechosos».
La chica había salido de su casa, en Plottier, el jueves último por la noche y como no regresó, sus familiares denunciaron su desaparición en la primera hora del sábado en la comisaría séptima de esa localidad.
El crimen causó conmoción en la provincia patagónico, donde este lunes el gobernador Omar Gutiérrez dispuso una jornada de duelo a su memoria. En el texto del decreto en el que se llevaba a cabo la medida se aseguraba que se está «llevando a cabo todas las medidas que permitan un pronto esclarecimiento de tan repudiable suceso.
Una enfermera de 42 años que se desempeñaba en el hospital Provincial José María Cullen de Santa Fe y que
permanecía desaparecida desde el viernes fue hallada asesinada al día siguiente y su expareja quedó detenida tras confesar el crimen.
Fuentes policiales informaron que se trata de María Cecilia Burgadt, quien fue encontrada en una casa asesinada a golpes y atada. La mujer había sido vista por última vez el pasado viernes por la tarde cuando se fue del trabajo.
Durante la madrugada del sábado se realizaron varias investigaciones y allanamientos que permitieron detener a la expareja de la enfermera, un hombre de 49 años identificado con las iniciales S.A.M., quien tenía el auto Volkswagen Gol que pertenecía a la víctima. El sospechoso no pudo justificar los motivos por los cuales tenía en su poder al auto de la víctima y más tarde confesó que había asesinado a Burgadt.
A partir de su declaración la policía se abocó con los datos obtenidos a la búsqueda del cuerpo de la mujer y finalmente logró encontrar a la enfermera muerta el sábado a la tarde.
Una mujer que había sido quemada por su exmarido en marzo pasado, falleció como consecuencia de las secuelas de ese hecho y ahora la justicia cambió la carátula del hecho, por el que está acusado y detenido Leonardo Víctor Zeniquel, de «lesiones graves en contexto de violencia de género» a «femicidio».
El hecho, según fuentes policiales, ocurrió los primeros días de marzo, cuando Vanesa Evangelina Caro, de 38 años, inició una discusión con Zeniquel, de 34 años, del cual estaba separado hacía más de un año. Ambos se encontraban en la casa de Ingeniero Budge, que la mujer habitaba junto a cuatro hijos, todos menores de 10 años y en un determinado momento Zeniquel rocía a Vanesa con alcohol y le prende fuego.
La escena fue presenciada por los niños, quienes luego relataron los hechos, contando que el padre había golpeado a la madre y la había prendido fuego, no dejando que saliese de la vivienda.
La mujer fue atendida en varios nosocomios, hasta que terminó internada en el Instituto del Quemado, donde tras practicarle una traqueotomía debido a la gravedad de su cuadro, le dieron de alta en mayo para que continuase un tratamiento ambulatorio. Finalmente Vanesa falleció como consecuencia de complicaciones con la traqueotomía.
La fiscal a cargo de la causa, Claudia Postiglione, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 de Lomas de Zamora, al tomar conocimiento del hecho modificó la carátula inicial por la de femicidio, en tanto que Zeniquel continúa alojado en la Unidad Carcelaria 1 de Lisandro Olmos. (Fuente AF)