En el mes de la mujer llega la película LA VOZ DE LA IGUALDAD
Coincidiendo con el Mes de la Mujer y el cumpleaños de Ruth, Diamond Films estrena LA VOZ DE LA IGUALDAD, película basada en la historia real de la Jueza de la Suprema Corte de Justicia de los Estados Unidos, Ruth Bader Ginsburg, a quien Gloria Steinem describe como «lo más cercano a un superhéroe que conozco».
La directora Mimi Leder confiesa que, al leer el guión, su reacción fue visceral y pensó, “Tengo que hacer esta película”, recuerda.
Leder se vio obligada a contar la historia de esta mujer fuerte que, contra todo pronóstico, pudo realizar sus sueños, así como impulsar un gran avance en la humanidad en su lucha por la igualdad y el movimiento por los derechos de las mujeres. Además, sintió una cierta conexión con Ginsburg. “Quería contar su historia porque yo también he sido víctima de la adversidad y discriminación, ya que he luchado mucho por trabajos que hombres menos capacitados han conseguido”, afirma.
Según el productor Robert Cort, “La voz de la igualdad es la historia del origen de una de las grandes mujeres de nuestro tiempo. Digo “historia del origen” con una verdadera especificidad del mundo de los superhéroes porque Ruth, en muchos sentidos, es nuestra superhéroe”, señala. “En la película, los primeros 15-20 minutos, su tiempo en Harvard, su tiempo en Nueva York, son los momentos y los eventos que realmente cristalizaron quién es ella como persona”.
Entre algunos de los avances para las mujeres, Ginsburg cofundó el Proyecto de los Derechos de las Mujeres en la ACLU en 1972. Durante su tiempo en el Proyecto de los Derechos de las Mujeres y ACLU, participó en más de 300 casos de discriminación de género, incluyendo el caso en que por primera vez la Corte aplicó la Cláusula de Igual Protección de la Decimocuarta Enmienda para abolir una ley que discrimina a las mujeres. Ginsburg fue la autora del escrito original. Además, argumentó seis casos de discriminación de género ante el Tribunal Supremo entre 1973 y 1976, de los que ganó cinco.
En 1996, Ginsburg escribió la decisión histórica de la Corte Suprema, Estados Unidos v. Virginia, que sostenía que el Instituto Militar de Virginia apoyado por el estado no podía negarse a admitir mujeres.