La salud provincial está en llamas

Tal como lo vivimos con la educación pública, y la falta de mantenimiento y presupuesto provincial para la infraestructura de las escuelas, lo mismo está sucediendo en el sistema de salud de la provincia de Buenos Aires. Hace no mucho tiempo lo vivimos en el Hospital Oñativia de nuestro distrito: si bien se produjo una falla eléctrica en el tablero del Nosocomio, lo cierto es que la arquitectura del mismo nos remitió a que el control eléctrico del hospital se encontraba debajo de la sala de terapia intensiva, cuestión que hasta la tragedia, nadie había pensado.

Ante uno de los presupuestos provinciales más bajos de la provincia de Buenos Aires, en materia de salud, del 5.5 por ciento del producto bruto interno: uno de los presupuestos más bajos de la historia bonaerense, las lluvias provocan que los hospitales, por citar un ejemplo el Evita de Lanús, se inunden poniendo en riesgo la vida de pacientes y de trabajadores.

Hace pocos días, dos hospitales de alta complejidad en el corazón de la provincia de Buenos Aires, como lo es la ciudad capital La Plata sufrieron consecuencias de la falta de mantenimiento provincial: el primero el hospital San Martín, que con sus cuatro manzanas, y sus 14 quirófanos se quedó sin luz dos veces, y los médicos tuvieron que terminar las cirugías alumbrando con celulares, donde se pusieron en riesgo la vida de los bebés de la terapia neonatológica, entre otros.

El otro hospital que vio la peor cara de la desidia provincial fue el Hospital de Niños, Sor María Ludovica que vivió la deshidratación de los pacientes porque ante las altas temperaturas no pudo hacer funcionar el aire acondicionado.

Lo cierto es que a pesar de los grandes esfuerzos de los distritos por resolver la situación de los vecinos y de la tarea de gestión que pueden realizar y realizan los funcionarios municipales desde hace tiempo la provincia de Buenos Aires, dejó abandonada la salud pública cuando la sociedad que está en crisis y que no puede acceder al sistema privado de salud, más la necesita.