Aniversario 62 de Emaús Burzaco

Emaús Burzaco se encuentra en Francisco Paez y Agustín Magaldi, S/N°, de la localidad de Ministro Rivadavia. Fue fundado el 4 de junio de 1956 por un grupo de personas allegadas a la Parroquia Inmaculada Concepción de Burzaco.

Desde 1985, la Casa del Niño atiende a 400 niños de familias desfavorecidas de la localidad de Ministro Rivadavia, de entre 2 y 16 años. Los más pequeños asisten al jardín de infancia y a la guardería Los Pollitos, mientras que los adolescentes reciben apoyo escolar y disponen de una gran variedad de talleres artísticos, culturales y deportivos. El objetivo de Emaús Burzaco es que los niños aprovechen el tiempo libre que tienen después de asistir a la escuela pública y conseguir que adquieran confianza para construir su propio proyecto personal. Por otra parte, en el Instituto Técnico Emaús se imparte formación profesional (electricidad, mecánica, costura y peluquería) a personas de todas las edades. Si bien los salarios de los docentes corren por cuenta de la Provincia, todo los demás costos son cubiertos por Emaús Burzaco. En la escuela se capacita laboralmente a adolescentes y adultos. Los chicos de la secundaria se reciben con el título de Maestro Mayor de Obras y por la noche se dan cursos de formación profesional a los adultos. En su mayoría duran un año y se dan tres días a la semana.

Además, está la Comunidad de Vida y de Trabajo. Sus compañeros recogen materiales reciclables (papel, metal, vidrio…) y los venden en varias tiendas para financiar las actividades educativas. Las tareas de reciclado son realizadas por voluntarios que colaboran en la asociación, y por personas que fueron rescatadas de la calle, que “viven en las diferentes instalaciones” de Emaús Burzaco. La organización, además de las donaciones, cuenta con los ingresos de los socios. Para asociarse se pide “lo que cuesta un kilo de pan”. La ropería es una suerte de “mercado de pulgas” a donde la gente puede donar cosas que ya no le sirven y allí, las reciclan y las ponen a la venta.

El origen del nombre, Emaús, es el de una localidad de Palestina donde unos deseperados volvieron a encontrar la esperanza. Este nombre evoca en todos, creyentes o no, una común convicción de que solo el amor puede unirnos y hacernos avanzar juntos. El movimiento Emaús fue fundado en Francia por el abbé (abad) Pierre. Nació en dos tiempos: primero en 1947, cuando el abbé Pierre alquila una casa deteriorada en Neuilly-Plaisance, 14 km al este de París. La reconstruye y abre un albergue juvenil internacional al que da el nombre de «Emaús», como símbolo de la esperanza renovada. El segundo paso tiene lugar en 1949, cuando invita a Georges Legay (un desesperado suicida) a construir alojamientos para las familias sin techo.

En sus comienzos, Emaús se financiaba con el sueldo de diputado del abbé Pierre, pero en 1951 renunció a su acta. Al faltar el dinero, el abbé Pierre comienza a mendigar por las calles de París. Los otros miembros del grupo proponen entonces que todos se dediquen a buscar en la basura, para recuperar y vender todo aquello que sirva. Cuando en el crudo invierno francés de 1954 comienzan a morir personas en las calles, el Abbé Pierre lanza su célebre llamamiento en Radio Luxembourg: «Amigos, una llamada de socorro. Una mujer acaba de morir congelada esta noche en la acera del bulevar Sebastopol, y en sus manos tenía el papel de expulsión de su vivienda». Así comienza la Insurrección de la Bondad, y en los días siguientes se recogen más de dos mil toneladas de donaciones. Durante los años 50 van surgiendo en diferentes países comunidades que imitan el ejemplo del abbé Pierre, y lo siguen como modelo. En 1969, en Berna, Suiza, 70 grupos provenientes de 20 países adoptan el Manifiesto universal del Movimiento Emaús, y deciden crear una secretaría internacional de enlace. En 1971, el Movimiento Emaús se convirtió en Emaús Internacional.

El preámbulo del Manifiesto universal de Emaús Internacional empieza diciendo: El objetivo de este movimiento es “actuar para que cada ser humano, cada sociedad, cada nación pueda vivir, afirmarse y realizarse en el intercambio y el compartir”. En estos valores de solidaridad y atención preferencial a “quien más sufre”, basados en el desarrollo de la justicia entre las personas y los pueblos Emaús intenta “poner hombres de pie” según la consigna del abbé Pierre, quien estuvo 4 veces en Emaús Burzaco, pernoctando  en  la Comunidad de Traperos y almorzando en Casa del Niño. En la actualidad, Emaús Internacional cuenta con 350 grupos en 37 países.